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Hoy hablamos con Andrea Mazariegos, una apasionada por la construcción de ecosistemas de emprendimiento y Líder del proyecto Action Research para Swisscontact Guatemala, Jose Andrés Díaz, Director de IC Fundación, una organización que fortalece y financia a empresas de comunidades vulnerables en Colombia, y Daniel Calvo Sanz, Cofundador y Presidente de Fundación Gen E, una incubadora de Córdoba, Argentina, especializada en el apoyo a proyectos de triple impacto.
Las tres organizaciones forman parte de la Red de Impacto, un conjunto de organizaciones que trabaja por la Reactivación Económica y Social de América Latina, de la cual tenemos el honor de formar parte desde Efecto Colibrí.
«La tecnología puede ser una fuerza para la inclusión y el desarrollo, pero también una fuerza de exclusión» (Andrea Mazariegos)
De allí la importancia de diseñar soluciones tecnológicas que potencien la inclusión, la equidad, la justicia, la regeneración, en otras palabras, el impacto socio-ambiental positivo. En este podcast nos inspiramos con casos de emprendedores que están usando la tecnología para el bien común, exploramos el concepto de ecosistema Impact Tech, y también los avances y los desafíos que trae esta dupla tan potente: tecnología e impacto.
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Hoy hablamos con Andrea Mazariegos, una apasionada por la construcción de ecosistemas de emprendimiento y líder del proyecto Action Research para Swisscontact Guatemala, Jose Andrés Díaz, Director de IC Fundación, una organización que fortalece y financia a empresas de comunidades vulnerables en Colombia, y Daniel Calvo Sanz, Cofundador y Presidente de Fundación Gen E, una incubadora de Córdoba, Argentina, especializada en el apoyo a proyectos de triple impacto. Las tres organizaciones forman parte de la Red de Impacto, un conjunto de organizaciones que trabaja por la Reactivación Económica y Social de América Latina, de la cual tenemos el honor de formar parte desde Efecto Colibrí.
En este podcast nos inspiramos con casos de emprendedores que están usando la tecnología para el bien común, exploramos el concepto de ecosistema Impact Tech y mucho más. Andrea: Creo que uno de los principales beneficios de la tecnología es que diversifica el acceso a recursos y además permite resolver problemas grandes y graves, que han prevalecido durante muchísimos años en nuestros países de Latinoamérica, a través de soluciones nuevas e innovadoras, que no dependen de tener acceso a una cantidad gigantesca de capital.
La tecnología puede ser una fuerza para la inclusión y el desarrollo, pero también una fuerza de exclusión.
Entonces, es importante cuando se diseñan soluciones tecnológicas pensar cómo voy a lograr incluir la mayor cantidad de personas en este proceso, proyecto, producto o servicio que estoy desarrollando.
La implementación de tecnología en temas de emprendimiento, debe hacerse siempre con un lente de inclusión de género, respeto y atención a poblaciones vulnerables.
Daniel: Me parece interesante sumar el tema de accesibilidad de servicios, beneficios a una mayor cantidad de personas.
Precisamente la tecnología desde el punto de vista de los proyectos de impacto, nos permite escalar y amplificar el impacto y eso es muy potente.
Tenemos que aprender a usarla como nuestro aliada, aún más en el contexto de las nuevas tecnologías exponenciales, las tecnologías que se aplican a la industria 4.0 o que se pueden aplicar a salud, educación, por ejemplo.
Jose: Somos una fundación que trabaja con emprendimientos asociativos rurales, no trabajamos con empresas tecnológicas, sino con cooperativas de pequeños productores de café, de coco, cacao en diferentes lugares de Colombia.
Utilizamos herramientas tecnológicas para ayudar a mejorar la gestión empresarial y los procesos internos de las asociaciones rurales.
Andrea: Se me ocurre primero es Tu Consejería, es un servicio de atención de salud mental 100% virtual, enfocado en jóvenes que son la base de la pirámide o de áreas vulnerables de la ciudad. Es un proyecto que tiene un costo y para los jóvenes también lo tiene, pero está diseñado para que este costo sea algo que ellos puedan pagar.
Tu Consejería busca democratizar el acceso a salud mental para jóvenes en situación de vulnerabilidad. Reciben atención desde un teléfono móvil o desde una computadora.
Daniel: Me parece inspiradores algunos proyectos de emprendedores cordobeses, por ejemplo, Proyecto Prócer, un dispositivo portátil de lectura auditiva que convierte texto en audio, de manera que facilita que personas ciegas puedan leer cualquier tipo de libro que no esté adaptado. Luego, el proyecto Caecus Lab, que se dedica a través de la creación de una especie de lentes para ciegos facilitan el desempeño habitual en su vida diaria. Son lentes que se construyen con material reciclable, se reutilizan componentes de celulares fundamentalmente y a través de un software que ellos han desarrollado, se convierte en un aliado en una asistente diario de personas ciegas.
OTTAA Project, devuelve la voz a los que no pueden hablar a través de la utilización de tecnología de inteligencia artificial y machine learning. Reemplazan el libro de pictograma para que, por ejemplo, alguien que ha sufrido un ACV (Accidente Cerebrovascular) y no puede hablar, pueda comunicarse con su entorno a través de un software.
Teilú, una plataforma de cine de tipo Netflix para ciegos, sordos y disminuidos visuales, y también Aipha G muy reconocido al igual que OTTAA Project, están trabajando con UNICEF y se dedica a acercar las personas a través de la utilización de la tecnología de la realidad aumentada.
Jose: En el caso colombiano y en el sector que trabajo de emprendimientos rurales hay unas plataformas muy interesantes de comunicación para poder llegar a la gente en territorios donde no hay señal de internet, ni siquiera de celular o donde no tienen smartphones, y a través de plataformas con mensajes de texto se están implementando programas de educación financiera o programas de comunicación para poder dar información a los productores sobre el clima, etc.
Cosas tan sencillas como un mensaje de texto o una tabla en Excel puede realmente generar un cambio e impacto muy importante, la tecnología hoy tiene que ser a la medida de las necesidades en las comunidades, en este caso, rurales.
Andrea: Normalmente cuando pensamos tecnología, pensamos en cosas virtuales y aplicaciones, pero la tecnología también es desarrollo de soluciones como la que hizo Kingo , que son paneles solares que se instalan en las casas de personas donde no hay tendido eléctrico y les permiten comprar paquetes de electricidad de forma periódica para poder tener acceso a electricidad a través de mensajes de texto.
Uno de los conceptos más interesantes que he escuchado y que estoy abogando para que pase en Guatemala, es que nos volvamos un ecosistema de Impact Tec, enfocado en utilizar la tecnología para crear estas soluciones de impacto.
Daniel: Por ejemplo Teilú tiene un desarrollo en su modelo, en su concepción que es customer centric, ellos no han ideado algo en un laboratorio o detrás de un escritorio, sino que todo ha surgido de trabajo conjunto con aquellos a los que querían beneficiar.
Si vamos a desarrollar tecnología, debe ser junto al beneficiario para que lo que desarrollemos seamos sea una solución que efectivamente les genere una contribución clave en aquellos aspectos que les duelen más.
Andrea: Uno de los primeros puntos es acercar a las personas que están cercanas a los problemas, a la creación de soluciones y me refiero a volver el acceso a la formación en tecnología, algo que sea universal, que se democratice.
Democratizar la formación en tecnología empieza por cambiar la narrativa cultural de que sólo cierto tipo de persona puede trabajar en tecnología. Los modelos de Mark Zuckerberg o Elon Musk, no nos representan Latinoamérica.
Entonces, poner a estos emprendedores tecnológicos que se ven como nosotros, que suenan como nosotros, que tienen una cultura parecida a la nuestra y volverlos a ellos el centro de atención es decir: «mira, no te tienes que ver cómo Mark Zuckerberg, ni tener su dinero, ni haber ido a Harvard para iniciar una solución tecnológica».
Finalmente, personas que vienen de la base de la pirámide, que vienen de estar viviendo tantos problemas sociales y económicos en Latinoamérica, puedan un día convertirse en las mismas que crean soluciones, eso sería mi sueño hecho realidad.
Daniel: Realmente creo que sería un sueño hecho realidad. Es importante que haya concientización y un trabajo de incidencia pública, para que tanto actores públicos como privados ayuden a que haya cada vez más emprendedores de impacto y combinados con la potencia del emprendimiento tecnológico.
Es importante que los emprendedores de impacto y los emprendedores tech (tecnologógicos) no vivan en círculos separados sino que se conozcan y trabajen juntos.
Nosotros aquí en Córdoba tenemos por ejemplo la organización hermana que es ASETEC, trabajamos codo a codo. Los emprendedores de impacto cuando se juntan con los tecnológicos, logran escalar los impactos, la sociedad mejora con soluciones.
Jose: Hay muchos tipos de soluciones educativas, de educación financiera y de software para mejorar temas contables, administrativos o también soluciones para ayudar a que gente que tiene un negocio pueda comercializar las plataformas de e-commerce, etc. Entonces, creo que ahí tenemos una responsabilidad importante de ayudar a formar y generar ciertas capacidades en esas comunidades.
Es necesario adaptar soluciones que ya existen, llevarlas a zonas rurales y que sea interesante para las empresas desarrolladoras poder llegar con esas soluciones a territorios, ya que hay un gran potencial de mercado.
Jose: Hay modelos y plataformas de educación financiera a través de mensajes de texto que son interesantísimas y con impactos comprobados, también modelos que funcionan sin internet de formación en diferentes cosas, iniciaron con la educación financiera, pero poco a poco se han ido desarrollando muchos temas de formación en comunidades donde no hay colegios o es difícil tener acceso a cierta información importante, ese es un ejemplo clásico. Pero también hay otros ejemplos, como el que mencionaba Andrea, de tecnologías para llevar energía a sitios donde no hay, donde no hay red eléctrica o purificación de agua o de logística de comercio para optimizar los productos que pueden sacar de una ciudad a otra, o para hacer alianzas comerciales y evitar intermediarios.
Maite: Se me viene a la cabeza el caso de Arbusta, una empresa social que está en Latinoamérica, que emplean a jóvenes de barrios vulnerables, sin experiencia ni formación en tecnología y entablan como todo un circuito de aprendizaje y una cultura organizacional que les permite tener su primer empleo formal y ser expertos en tecnología y vender ese servicio tecnológico a grandes empresas. Me pareció interesante traerlo, en esto de democratizar el acceso a la educación en tecnología. Andrea: Definitivamente la educación y la formación en tecnología. Normalmente cuando una empresa de impacto aplica procesos de inversión y dentro de su pitch a los inversionistas les dicen -mire, yo necesito esta inversión para poder contratar un sitio-, que es el Chief Technology Officer (Director de Tecnología), entonces el inversionista automáticamente o el proyecto pierde credibilidad, porque el inversionista dice -bueno, si no pudiste convencer a un CTO o no lo tienes dentro de tu equipo, significa que no le pudiste vender a nadie tu proyecto-, ¿por qué te lo debería de comprar? Eso viene muchísimo de las bajas tasas de formación en tecnología.
El siguiente desafío es que normalmente los emprendedores sociales no están tan bien conectados dentro de los círculos de inversión locales.
Esto dificulta muchísimo que accedan a capital, o no están familiarizados con los términos de inversión, con qué implica, o los tipos y vehículos de inversión existentes y también los inversionistas no están familiarizados con ¿qué es una empresa social? ¿Cómo funciona? ¿Cómo se capitaliza?, etc., o una empresa de impacto, tampoco.
Daniel: En el caso de los emprendimientos de impacto y sobre todo los que tienen componentes tecnológicos, hay un desafío fuerte en cuanto a la accesibilidad de llegar a este financiamiento, sobre todo en cuanto a inversión, en algunos casos hablan de private equity, el financiamiento por inversores que aportan a las empresas tomando participación accionaria.
Hay un problema, por lo menos en Argentina, todavía encontramos que la visión de los inversores es muy incipiente en términos de querer resignar rentabilidad para priorizar el impacto.
Es muy probable que un proyecto de impacto al inicio genere algo menos de rentabilidad que aquellas empresas que no tienen en cuenta los aspectos sociales y ambientales. Entonces es necesario que esa realidad esté alineada con inversores.
Entonces ese es un desafío que creo que está alineado con una comunidad que cada vez está más ávida de comprarles a este tipo de proyecto, de darles apoyo, de canalizar recursos y que claramente necesitamos que sean más y que sean la norma.
Jose: Creo que desde el punto de vista de las regiones y territorios alejados, hay un reto muy grande en términos de formación y de capacidades para poder desarrollar y para adaptarse a estas tecnologías que ya existen. Creo que hay una brecha todavía muy grande en términos de formación, en términos de capacidades.
Creo que la inversión de impacto está avanzando más rápido que la brecha en formación en los territorios.
Andrea: Diría que el impacto no pelea con la sostenibilidad financiera y que la tecnología es una fuerza transformadora para bien y entre más personas van a acceder, más lejos llegamos.
Jose: A la tecnología hay que desarrollarla con la gente, o sea, no es necesario imponerlo, creo que hay que trabajar en adaptar y desarrollar tecnología con la gente, para la gente. Otra cosa, la tecnología es no solamente cosas súper avanzadas, hay pequeñas herramientas de tecnología que pueden hacer un impacto importantísimo en una comunidad o en un emprendedor.
Daniel: La verdad agradezco este espacio porque estoy descubriendo gente con la que compartimos valores en toda Latinoamérica y me parece súper valiosa. Para ponerlo en un twit, quiero destacar el concepto que me encantó de Andrea de trabajar para la creación de un ecosistema Impact Tech, creo que eso sería importante a nivel Latam y trabajar para que cada vez haya más emprendedores trabajen precisamente desde este enfoque de dar soluciones a los dolores que más nos preocupan. Con todos los problemas que tenemos en Latinoamérica, necesitamos cada vez más innovadores sociales. También el tema de democratizar y hacer llegar esa tecnología a los sectores rurales, a los desfavorecidos, creo que deberíamos todos aunar esfuerzos en eso.
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