Desde hace unos años las nuevas tecnologías forman parte de nuestra vida. Nos exponemos a un público virtual y mostramos una parte de nuestra realidad. Las tecnologías pueden ayudarnos a ser más eficientes y facilitarnos la vida. Sin embargo, esta exposición puede jugarnos malas pasadas si no prestamos atención a los detalles.
En este episodio conversamos con Lia Hernández, co fundadora de IPANDETEC, una organización que vela por los derechos humanos en el mundo virtual. Lia nos revela los peligros del internet, lo que hay que tener en cuenta para hacer un uso correcto de las mismas y nuestra responsabilidad de proteger los datos de nuestros beneficiarios como emprendedores sociales.
Muchos de los internautas, cuando navegan, hacen click y se registran aquí y allá, dan datos innecesarios que luego pueden ser usados en su contra.
Cuando recibimos un e-mail o un mensaje de texto de una empresa en la que creemos, solemos confiar e incluso agradecer su interés. Resulta que no es oro todo lo que reluce y existen empresas que se dedican a capturar tus datos personales para lucrarse.
Todo contenido que compartamos en la nube pasa a tener más de un derecho de autor. En primer lugar el del creador, y después el de la página en la cual se publica. En la entrevista Lia explica cómo conocer el tipo de consentimiento que damos, a quién y lo que debemos tener en cuenta al hacer click.
“La prevención es la mejor herramienta para no lamentar” afirma lia.
Además, Lia nos comparte herramientas alternativas, diseñadas por organizaciones que velan por nuestros derechos humanos, para proteger nuestra información. Por ejemplo el buscador Duck Duck Go, el e-mail Protonmail o el browser Mozilla Firefox.
Como emprendedores sociales es importante que tengamos especial cuidado con el manejo de la información de nuestros clientes o beneficiarios. Sobre todo con la información que compartimos sobre grupos vulnerables, ya que esta información puede ser mal usada.
Esto no significa que debamos demonizar las redes sociales o dejar de usarlas, ya que para cumplir nuestra misión queremos llegar a los oídos y ojos de las personas correctas. Lia nos explica cómo hacer buen uso de ellas.
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