Hoy converamos con Rodrigo Villar, uno de los pioneros del ecosistema de emprendimiento social e impacto positivo en México y América Latina. Es el socio fundador de New Ventures México, una organización que co-impulsó hace 17 años y desde la cual se ha promocionado a las empresas sociales en América Latina. Fundó las Páginas Verdes, el Ecofest, el FLII (Foro de Inversión Impacto de América Latina), Adobe Capital, la Alianza por la Inversión de Impacto México y además escribe una columna en la revista Entrepreneur.
En este episodio Rodrigo Villar nos comparte lo que le motiva a empujar el cambio en positivo para la región, los modelos que ha explorado para lograr su propósito, lo que ha aprendido en el camino, y mucho más.
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Antoine Cocle: Buenos días Rodrigo, bienvenido a este episodio de Inversión con Sentido, es un placer.
Rodrigo Villar: El gusto es mío Antoine.
Antoine Cocle: Nos conocemos hace casi diez años en el contexto de Adobe y siempre he admirado la importancia de tu trabajo desarrollando el ecosistema dentro de New Ventures. Eres el socio fundador de New Ventures México, una organización que creaste hace 17 años y desde la cual has sido uno de los impulsores del emprendimiento social en México y desde el cual se han acelerado empresas sociales en América Latina, has fundado las Páginas Verdes, el Ecofest, el FLII (Foro de Inversión Impacto de América Latina), Adobe Capital, la licencia para inversión de impacto y además desde hace unos meses empezaste a escribir una columna en la revista Entrepreneur. ¿Se me escapa algo más?
Rodrigo Villar: Me recordaste de las cosas que funcionaron, pero hay un montón de cosas que no funcionaron, se quedaron en ideas o fracasaron.
Antoine Cocle: Es lógico, porque cuando uno busca en las redes o en internet lo único que encuentra son las cosas que siguen existiendo o haciendo ruido hoy. Quizá podemos empezar entonces por la evolución y la historia del ecosistema de emprendimiento, a través de la historia y nacimiento de New Ventures. ¿En qué contexto y con qué intención fundaste New Ventures?
Rodrigo Villar: Hace diecisiete años, estudié contabilidad y finanzas, aunque realmente la contabilidad nunca fue lo que me apasionara, trabajé un año en como contador, en tesorerías de algunos corporativos grandes y me fui a hacer una Maestría en Australia, un MBM. Fue ahí donde empecé a escuchar seriamente sobre emprendimiento, como que el contexto de hace diecinueve años en México era la gente que iba a una universidad privada que estudiaba finanzas, la meta creo que era trabajar en una multinacional. Los jóvenes aspiran más a buscar un empleo en una multinacional más que emprender y creo que fue en Australia donde empecé a escuchar más seriamente sobre eso.
Terminé el MBM y trabajé unos meses con un banquero de inversión y me empecé a entusiasmar, que era lo que quería y que nunca fui feliz en un corporativo, siempre fui un poco mal empleado, criticaba todo, me gusta ver cómo mejorar las cosas, como innovar, lo cual no era un perfil bien visto en una multinacional. Entonces, regresé a México para empezar a buscar algo más ligado a esa parte de emprendimiento y tuve la gran fortuna de encontrarme con New Ventures, yo no lo fundé. La historia es interesante porque New Ventures nació como un programa del World Resources Institute, que es un centro de investigación de temas medio ambientales más importantes del mundo, basado en Washington y ellos son los que vinieron con esta idea de decir que el capital privado tenía que servir a la conservación.
Que todos los apoyos gubernamentales o filantrópicos debían apoyar la conservación del medio ambiente, se estaban quedando muy cortos. Entonces, la visión era que si el sector privado no se involucra como un aliado en solucionar las problemáticas sociales, ambientales, vamos a perder la guerra.
New Ventures nace como una especie de programa que buscaba demostrar que los emprendimientos medioambientales podrían ser rentables.
A mí me contrataron para abrir el programa en México, era un programa filantrópico donde básicamente la intención era identificar 10 emprendimientos ambientales, vincularlos con mentorías, con fuentes de financiamiento, con consultoría para poder apoyarlos y crecer mucho, y sobre todo lo más importante era poder contar esas historias. Siempre tuve la imagine de que si podía poner un emprendedor social en la portada de Revista Fox o Expansión, entonces iba a ser un gran logro, entonces íbamos a demostrar que las empresas ambientales podrían ser tan rentables como las tradicionales.
New Ventures nace con esa idea de apoyar emprendedores, lo más importante era el efecto demostrativo, donde decíamos el impacto que pueden tener en ayudar a 10 empresas es bueno pero no se compara con el impacto que podrá tener el cambiar una manera de pensar, el poder demostrar que esos emprendimientos eran rentables, poder convencer a los inversionistas y al sector privado en empezar a voltear a ver los negocios ambientales. Es un programa que además de México se expandió a 6 países, estuvimos en un momento en China, Indonesia, la India, Colombia y Brasil.
Fue complejo, yo no sabía nada de sustentabilidad ni de medio ambiente, pero no dejaba de emocionarme, voy a poder hacer lo que me gusta y al mismo tiempo, va a ser por una buena causa. Tuve que irme adentrando donde podía conocer estas empresas, realmente fue abrir google y empezar a industria por industria, había algo de ecoturismo, energía renovable y empezaban a haber algo de tecnología hacia las renovables, pero no existía una industria como tal. Muchas veces las empresas con las que contacté no se consideraban empresas ambientales. La primera convocatoria que hicimos identificamos 30 empresas, de las cuales seleccionamos 10 y fue un año de buscarlas, realmente fue complicado pero muy gratificante al mismo tiempo.
En realidad New Ventures empieza como un programa que lo que busca es apoyar a estas empresas, pero no existía como tal el término aceleradoras. La historia de esto es que lo hicimos una vez, lo hicimos una segunda vez y pues parte del reto es que teníamos un presupuesto muy reducido (USD 30000) para pagar también al equipo. Creo que ese reto de conseguir fondeo nos obligó a empezar a buscar cosas que fueran sostenibles. No podemos nosotros (un programa que busca la sostenibilidad en la conservación) no ser sostenibles. Nos pusimos el reto de que teníamos que encontrar nuestras propias fuentes de ingreso y no podíamos depender de donativos toda la vida.
Entonces de ahí nacieron algunas iniciativas como fue las Páginas Verdes que fue un directorio de empresas ambientales que sea sostenible y que me ayude también a difundir estas empresas. De ahí nació Páginas Verdes, que duró diez años de manera sostenible y en el Inter, también hicimos el primer foro de negocios Verdes o de New Ventures, que también nos dejó algo de recursos, pero nos permitió empezar a crecer al equipo y fue donde hablamos con el fondo mexicano y decidimos crear un spin off porque realmente a nivel de interés New Ventures no encajamos en la forma operativa del Fondo Mexicano para la conservación.
Encontramos una oficina enorme porque éramos cinco personas con la idea de crear una especie de coworking que tampoco existían los coworking en ese entonces, pero nosotros creíamos que a las empresas que apoyamos podemos darle ese servicio también de darles un poco la facilidad de tener un espacio bonito, donde pudieran convivir. Nos constituimos como una empresa independiente y eventualmente a nivel global como un programa filantrópico, en ese momento World Resources Institute decidió terminar el programa y para ese entonces, de los seis programas de nivel que existía en el mundo, realmente todos dependían casi al 100% de donativos. Afortunadamente para ese entonces ya éramos independientes y sostenibles. Ya empezábamos a pensar en crear un fondo capital, New Ventures desapareció del resto de países y nosotros nos dieron el permiso de seguir con la marca. Creamos el fondo, empezamos a tener una visión también más hacia Latinoamérica, donde creíamos que había una necesidad grande, no sólo México.
Antoine Cocle: Me parece muy interesante como empezaron a hacer Blended Finance. Primero necesitas un capital filantrópico que sea catalítico para atraer un capital y empresas sostenibles. ¿De dónde sale esa idea y por qué lo hicieron? Y ¿es algo que tú recomendarías a otros que hoy en día están armando un fondo para que se estructuren así?
Rodrigo Villar: Sí, es un tema muy complejo. Nosotros nos consideramos como una empresa guiada por nuestro propósito, por nuestra misión. Siento que algo muy importante para nosotros es que nuestra misión no ha cambiado en estos 17 años.
Creo que es importante para cualquier persona que quiera crear una organización híbrida tiene que estar muy clara en su propósito y jamás desviarse.
No estamos pidiendo donativos con un bote en la calle, realmente los donativos que recibimos son de organizaciones que buscan promover esto. Por ejemplo, ahorita lanzamos un programa para apoyar empresas de agronegocios y viene como un donativo de una empresa, entonces ese dinero que nos están dando tiene un fin, no estamos pidiendo recursos para fondearnos a nosotros.
La verdad es que New Ventures es un grupo, hoy nos llamamos New Ventures Group, la verdad es que es una maraña de empresas, en algún momento hemos tenido siete razones sociales. Nos pasó mucho cuando hicimos el fondo de capital, que no cabe en una sociedad civil o en la sociedad anónima. Tiene que ser un vehículo independiente por sí mismo y entonces constituimos lo que se requería para hacer esto, cada empresa tiene una especie de consejo, en muchas compartimos socios, pero todas están ligadas a este grupo. Lo que compartimos es la misión, el soporte operativo, la oficina, la cultura laboral, creo que es para mí lo más importante. Pero sí, sí ha sido complejo esta maraña institucional, pero creo que nos ha funcionado, tener esa libertad es lo más importante que nos ha permitido movernos.
Hay países donde existen estos vehículos híbridos, hay países donde no funcionan. Entonces yo creo que es parte del ser emprendedores, encontrar darle la vuelta a estas trabas que te podría poner una legislación. Pero nunca hicimos nada prohibido, simplemente no puedo hacerlo con estas estructuras, creamos una estructura diferente con un consejo institucional.
Antoine Cocle: Interesante porque normalmente los retos que se escuchan con este tipo de cintura son uno a nivel de gobernanza, segundo el riesgo fiscal y tercero es la complejidad operacional y ustedes han encontrado maneras de hacerla todo en todas esas tres cosas. ¿Cuál sería el secreto por lo cual ustedes lograron resolver eso?
Rodrigo Villar: Creo que la gobernanza siempre la hemos tenido, por ejemplo, que el fondo de capital tenga su propia gobernanza y una independiente. En algunas empresas tenemos socios diferentes y tienen su propia gobernanza. Creo que el factor común es que todos coinciden que estar dentro de esta parte de ese grupo tiene un valor adicional. Es decir, que en 17 años nunca hemos tenido un solo problema, ni con un donante, ni con la ley, ni con el fisco, porque todo lo hemos dicho de manera muy transparente y nuevamente regreso a que cuando tú lo haces todo con un propósito, las cosas funcionan. Un emprendedor siempre está buscando cómo poder solucionar el problema y poder encontrar la manera de hacer lo que tengas que hacer, es más sencillo de lo que tú crees. Por ejemplo, Fonda Capital, pusimos un fondo de capital, simplemente lo adherimos a la empresa. No tenía nada que ver con el grupo, simplemente éramos los mismos socios. Éramos dos socios dueños en partes iguales de varias empresas, compartimos una misión y decidimos ponerlos en un mismo grupo.
Antoine Cocle: ¿Cómo sientes que ha evolucionado el ecosistema y New Ventures para reaccionar a las evoluciones del sector y a los retos que tú ves en el sector?
Rodrigo Villar: Creo que New Ventures es siempre estar un paso adelante. Cuando algo se vuelve ya mainstream empieza a haber mucho, somos muy buenos en introducir conceptos, en arrancar cosas nuevas, este siempre ha sido nuestro reto. El ecosistema creció mucho, creo que ahora la gente que sale de una universidad, todos quieren ser emprendedores, realmente ha cambiado mucho la mentalidad de emprendimiento como tal y en el tema de impacto todavía más.
Creo que la gente hoy en día está muy consciente que no quieren simplemente crear una empresa para hacer dinero, los jóvenes de hoy quieren transformar el mundo, quieren hacer cosas que tengan un significado, algo más allá de simplemente hacer dinero.
Entonces esto ha traído mucha innovación al sector de impacto. Creo que también vivimos en una época donde sobra dinero en el mundo, o sea, cuando tú ves todos los países tienen tasa cero o incluso negativa, pues la gente que tiene muchos recursos, tiene que buscar dónde poner esos recursos y pues los bonos gubernamentales no son opción, creo que todos estamos cada vez más conscientes de los problemas que tiene la sociedad y sabemos que no podemos ir solos.
Creo que cada vez las empresas se han dado cuenta que el tema de responsabilidad social tiene que tener que forzosamente empezar a innovar, tienen que involucrarse no sólo con un donativo, sino con su expertise técnico en solucionar problemáticas. O sea, ha cambiado mucho la prensa habla más estos temas, la gente lo exige más a los consumidores. Entonces todas las empresas, los fondos, han tenido que emigrar hacia ser ciudadanos del mundo y poder ofrecer a sus clientes lo que están demandando, servicios con enfoque más social, más ambiental.
Diría que hoy en día el principal apoyo que estamos viendo es de empresas y en algunos casos filantrópicos, pero en muchos casos son empresas que ven en esto como una forma de innovar, de crecer. Se están dando cuenta que es más barato innovar a través de un emprendimiento, de ver que hay innovación en el mundo, que incluso sus su propio centro de investigación o las empresas están. Es más rentable salir a buscar emprendedores, están haciendo cosas interesantes y comprarlos que tener a 10 investigadores caros en un centro. Entonces creo que las empresas se están dando cuenta que la innovación del emprendimiento lo está rebasando por la izquierda.
Antoine Cocle: Hay una tendencia de fondo, siento que hoy en día los jóvenes que salen de las universidades, hay miles que quieren trabajar en ese sector de una manera u otra, creo que las empresas grandes si quieren atraer a esas personas tienen que adecuarse. Entonces por eso creo que el sector privado también nos debe de apoyar y acompañar esa transición, porque la gente lo pide. Creo que uno de esos casos de éxito, en cierta manera, es el trabajo que has hecho en New Ventures, que ha sido inspirador para muchos para entrar en el sector y me incluyo dentro de ellos.
Rodrigo Villar: Creo que algo que ha sido importante en la historia de New Ventures ha sido el talento, valoro la cultura laboral, la capacidad de atraer buen talento y también ha cambiado mucho. Hoy en día afortunadamente, cada vez hay más gente que quiere esto y realmente esa parte muy compleja de conseguir talento hoy en día realmente es sencilla. O sea, promovemos mucho la cultura laboral, la gente va y viene porque somos una nación muy joven, es un lugar atractivo para la gente que está en las universidades buscan estas oportunidades es otra dimensión. Me gusta estar siempre contando lo que hago y es como vas consiguiendo gente que piense similar, construyes aliados y es algo que como emprendedor tienes que estar haciendo, respira lo que haces, sueñas con lo que todo el tiempo estás platicando y de esas pláticas salen estas cosas.
Antoine Cocle: Y antes de hablar del 2021 y 2022, hablamos del ángulo de finanzas y de Adobe. Creo que algo que ha sido realmente importante para el ecosistema mexicano ha sido efectivamente la creación de Adobe. Entonces si nos puedes contar un poquito la historia, ¿cuál ha sido la tesis de impacto y la de inversión? y ¿cómo se compara cómo se relacionan con los vicios tradicionales, si se estructuran?
Rodrigo Villar: Pues bien, Adobe nació como lo que tú comentabas son una especie de blended banners, platiqué con el director de la Fundación Kellogg en México y platicamos de la necesidad que había que existiera un vehículo que pudiera financiar las obras que veíamos en otros apoyamos a veíamos cientos, sino miles de empresas al año y veíamos que había un match entre lo que buscaba estas empresas que encontrábamos y las opciones de financiamiento que tenían todos. En esas pláticas, la Fundación nos dio un donativo para poder empezar a investigar, estructurar la posibilidad, hacer un vehículo financiero para que pudieran apoyar estas empresas y logramos traer talento.
Me acuerdo por ahí de Rafael, allí a un español lo conocí por Twitter, llegó otra chica que estaba estudiando Hardware. Entonces empecé a formar un equipo de gente que conocía el sector, que estaban entusiasmados de que existía un fondo de impacto en México y pues empezamos a darle forma y en el Inter, me reencontré con Erik, él me habló un día tenía intención de hacer un fondo con un enfoque ambiental. Entonces nos reunimos, tenemos ideas muy similares. Muchos de los inversionistas y quizá la mitad de los inversionistas que entraron en el fondo de Adobe, eran fundaciones o eran familia oficiales ya muy ligadas a New Ventures, con los que hemos tenido algo de relación y que te compartieron un propósito que entendían que hacía falta un fondo inversión de impacto en México y pues lo que ellos llaman fondos catalítico, a lo mejor no eran inversionistas institucionales o que inviertan tradicionalmente, pero yo creo que la intención de invertir en Adobe fue más canalizar y detonar que existiera este fondo.
Entonces en el primer fondo invertimos en ocho empresas y posteriormente levantamos el segundo fondo. El primer fondo fue de 20 millones de dólares, el segundo fue de 30. Las tesis, esa estructura no es un fondo completamente tradicional, no movimos nada de cómo operaba un fondo tradicional del nuestro, de Venture Capital, lo que éramos distintos, pues era la visión de impacto y que era nuestro primer filtro.
Antoine Cocle: Estás diciendo que es un fondo tradicional, pero la estructura…
Rodrigo Villar: La estructura tradicional, pero el enfoque es de impacto. Lo que cambiamos de estructura y empezamos a innovar fue lo que ahora se llama Webby Brais Bain, que básicamente lo que buscan era que la mayoría de las empresas , no las inversiones tradicionales de Cuti, pues hemos visto que han sido muy limitadas. Entonces lo que hicimos nosotros es que es crear un híbrido donde básicamente creamos como un instrumento, que es como una especie de deuda convertible donde podemos invertir las empresas. Entonces al emprendedor le damos a la firma una flexibilidad muy similar al capital y para nosotros, para los que nos ahorrábamos un poco el problema de la salida, porque las empresas pueden desde que terminan su periodo de gracias nos empezaron a pagar. Entonces cada mes, íbamos generando nuestras propias salidas. Fue el instrumento que es que ha sido muy útil porque creo que hoy hay muchas empresas que no van a hacer el unicornio que son, pero son buenas empresas que van a tener crecimientos muy estables, que pueden ser muy rentables, pero no necesariamente están tirando a ser salida en bolsa y en este sector de impacto, vemos muchas de sus empresas, entonces será un instrumento interesante que estábamos ahí, en este híbrido de deuda capital y que a la fecha sigue siendo un instrumento muy exitoso.
Antoine Cocle: Es curioso que lo presentes como si fuera tradicional, cuando en realidad ese tipo de estructura es de inversión, no es para nada tradicional. Hoy en día empezamos a escuchar fondos que hacen ese tipo de estructura, pero en América Latina, sin duda ustedes son los primeros en hacerlo, bastante innovador. Y una cosa que estábamos hablando aquí eran notas convertibles y hablas del hecho de la conversión, pero si ustedes se convierten el problema en la salida no se resuelve y de hecho ahí se vuelve a complicar si te conviertes en el año 3 de tu inversión, ¿cómo funciona tu salida?
Rodrigo Villar: La verdad es que de todas las inversiones que hicimos en Adove como estructuramos más como una deuda y podíamos convertir siempre. Es decir, esta empresa se alinean las estrellas y hay una salida o podríamos convertir a Equity, tener una salida más grande o en un caso donde las cosas fueran mal, podrías recuperar algo. Siempre me gusta decir que Adobe Capital le tiraba mucho a meter muchos hits. Nosotros le tiramos de tener un 20, 25%, un 20% del retorno como portafolio. Bueno, es igual para muchos de los fondos tienen un unicornio y ese unicornio hace que tengan un 20% como portafolio. Nosotros le tirábamos más a tener esa estabilidad no demostró unicornio, pero tampoco nos tuvo los muchos outs.
Antoine Cocle: Creo que en el perfil de retorno al nivel de tu cartera cambia mucho porque también reduces como la varianza y a través de un modelo como el de ustedes donde maximice es a veces los Morand, por tener una estructura de Nairobi finesse. Pero por otra vez aseguras que nunca tiene sus momentos siendo la varianza o sea tu fondo a fin de cuenta que va a pasar, no sé si me haga alcanza tu objetivo de 20%, pero en el peor de los casos vas a retornar tu dinero, no vas a retornar cero y creo que es también una estructura muy innovadora desde este punto de vista.
Rodrigo Villar: Por supuesto que es innovadora, tiene sus limitantes. Cuando empieza una empresa, pues la misma inercia de la empresa te lleva a crecer. La gran mayoría de empresas que hemos generado en New Aventures su necesidad de financiamiento es de un millón de dólares o menos. Hay de todo de todo, pero la gran mayoría están ahí. Cuando das un fondo de capital de 1000 millones, pues no tienes dónde colocarlo o tendrás que invertir en cientos, sino miles de empresas y cooperativamente. Entonces algo que le pasa a los fondos es que predictivas su primer fondo, el segundo, tiene que ser más grande y la misma inercia te obliga a seguir teniendo fondos más grandes cabezas este un fondo más grande, pues tienes que tienes dos opciones o te vuelves un Softbank que son casas apuestas millonarias o te vuelves un fondo que necesita invertir en empresas más grandes.
En el caso de Adobe, nuestro foco nunca fue hacer apuestas millonarias, teníamos que empezar a buscar empresas más grandes porque seguía muy ligado a la deuda, financieramente no puedas cometer meter cinco millones de dólares en una empresa que vendía 500.000, eso nos obligó en Adove Capital, empezar a buscar empresas más grandes donde podamos colocar tickets más grandes y creo que esto nos fue sacando un poco del tema de innovación, pues nos empezamos a alejar de ahí porque empezamos a ver que era complejo invertir en startup o una empresa en etapas muy tempranas, no la misma empresa nos fue llevando a hacer inversiones en empresas un poco más consolidadas, empresas que todavía les cuesta trabajo conseguir rondas de deuda grandes porque todas eran nuevas, porque estaban teniendo todavía como ciclos no tan estables. Pues eso empezó a pasar a Adobe, que nos empezamos a alejar un poco de poder hacer inversiones en empresas en etapas más tempranas o más innovadoras.
Antoine Cocle: Quizás entramos entonces directamente en ese asunto, ustedes tuvieron la gran noticia hace muy poco el spin off de Adobe a Asagi, que entonces puedes contar un poquito ese deseo de mantenerse en la punta de la innovación, pero quizás puedes contar un poquito más de la historia, de ¿cuál es la historia de esa tradición y evolución?
Rodrigo Villar: Me considero como un emprendedor serial, me gusta mucho innovar, crear cosas nuevas y a la vez que nunca lo tuve en la mente, siempre pensé en crear Adove y hace un par de años mostraron un poco la intención de buscar una especie de alianza o comprar un porcentaje de Adobe Capital que no es un fondo canadiense con una tesis de alguna manera similar. Alguna visión también impactó, tener un fondo de renovables en Centroamérica, tiene un fondo para mujeres. Entonces es de los títulos en pláticas durante mucho tiempo y cuando al final una oferta para comprar esto era intención de comprar la mitad de Jeppe reestructurado de capital, como la administradora del fondo, el gestor del fondo.
La estructura realmente de los fondos de capital, pues tienen un background manager que es el administrador del fondo y que es un limited partnership que es el fondo del vehículo donde los inversionistas invierten realmente el límite pagan simple paga un fin para que el administrado por el trabajo que es buscar empresas. Entonces de alguna manera es el administrador, el gestor del fondo, el límite de panes y peces, el fondo tal cual. Entonces en la tentación de querer comprar el Lippi no se puede comprarlo porque son diferentes participaciones de inversionistas. Jeppe pues tiene su empresa, la empresa, la mitad del fondo gestor del fondo. Entonces dije que lo que quería era comprarle la mitad de medio de capital. La idea era hacer sinergia, crear un grupo más grande que no conocía mucho sentido porque volviendo a los inicios de 9:8, somos más una especie company vilde o una relación innovadora que busca sacar programas. Innovar trae eso trae a sus primeros inversionistas, pero conforme se empieza a crecer Adobe Capital, pues tú tienes que ir soltando que tengan su propia cultura, sus propias metodologías y de repente tienes un fondo que administra 50 millones de dólares y con una intención de que sean muchos más, pero realmente ya le empieza a quedar chico nueva en enchufes o a nivel CARLE.
Entonces se empieza a ver un poco más complejo la operación, no para las dos partes, porque en otros, por ejemplo Adobe Capital, pues la gente seguía teniendo una un email de nivel, pues no, cuando pues ya cada vez es más importante que tomen el de Adobe Capital, que tuvieran su propia, su propia estructura, su propia cultura. Cuando se tuvo una gran posibilidad de sumar fuerzas con un fondo más grande que permitiera a Adobe Capital tener su propia vida y seguir innovando.
Entonces decidí tomar una decisión que fue difícil, decidí vender mi 100% de mi participación en Adobe Capital y poderse enfocar 100% en lo que más me gusta, que es la parte innovación y todo el potencial que tiene New Ventures, pues mucho lo que estamos haciendo y darle viga Adobe, creo que Adobe ya está, ya no me necesitaban. No, creo que mis fortalezas profesionales no estaban ahí, estaba ya pues empezaba a profesionalizarme, tener gestores profesionales y no una persona disruptiva.
No quería vivir entre estos dos frentes, por un lado a tener un trabajo de este tamaño o seguir innovando en crear estructuras nuevas y decidí hacer lo que más me gusta y seguir el legado de la innovación es que la parte que he hecho los últimos siete años y la cantidad de cosas van haciendo en New Ventions, los proyectos y los sueños que no hecho siguen siendo muy grandes como para no prestar atención. Entonces decidimos en conjunto también con Erick y con equipo de capital, que lo mejor para todos era dejarlo ir, dejar volar a Adobe Capital.
Antoine Cocle: O sea, siento que se vincula mucho con todo ese concepto de Y6 del MIZA inicial y es decir que todo ese hueco entre el financiamiento, desde las microfinancieras hasta los bancos o fondista institucional estaba en un vihuela. Busca realmente trabajar en ese hueco, en el hueco que un adobe tampoco estaba pudiendo atacar hasta cierto punto. Entonces creo que sería interesante que expliques ¿Qué es Adobe Capital y cómo se creó?
Rodrigo Villar: De Adobe Capital, pues para mí fue un gran orgullo haber creado algo, haberlo vendido y para mí New Ventures también haber creado un concepto que hoy en día van a seguir creciendo con un socio, pues más adecuado para esto que viene, que es un crecimiento de llegar a tener un fondo de 70, 100 millones de dólares, creo que tiene un socio hoy en día mucho más adecuado, un equipo más profesional, un equipo más enfocado y bueno, volviendo al tema, pues algo aprendimos de Adobe, que estábamos dejando atrás las otras chicas, qué vamos a hacer, cómo hacemos este tema, pero vincularlo para empresas mucho más chicas.
Toma una acción de inversión hace seis meses para muy largos y cómo lo volvemos a que se hagan procesos de un día o como sea luego de una semana. Entonces, si no vamos mucho en esta parte de traerlo a un 3 millones de dólares en vigor, la inversión promedio de 70 mil dólares no son dimensiones completamente distintas, es donde básicamente lo que hacemos es que prestamos a las empresas un porcentaje de sus ventas, al igual que en Adobe nos van pagando, pero lo que hacemos es que la información o el algoritmo que usamos la información de las empresas desde sus pagos que hacen al fisco o a la hacienda. Entonces lo que reportan las empresas es que no nos conectamos a ese sistema. Tenemos toda la tecnología que la empresa, pues básicamente llena un pequeño formulario y con eso nosotros nos podemos meter a conocer la información en sus bancos y del fisco y sobre eso el algoritmo nos determina un poco la cantidad de dinero que podemos prestar a la empresa. El sistema se mete directamente a su facturación y cobramos un porcentaje de esa facturación, todo es completamente automático.
Antoine Cocle: Ustedes también lanzaron una nueva área de lo que llaman Novety Finance.
Rodrigo Villar: Nos dimos cuenta que en el sector había mucha intención de fundaciones, de family offices, no dejamos de recibir llamadas de familys offices o de inversionistas o de ministros que quieren traer el tema impacto. Muchos europeos y muchos americanos, pero simplemente no saben cómo empezar.
Entonces creamos una nueva área dentro del grupo que se llama Novety Finance, trajimos una socia que está a cargo de esa área en la que vamos a buscar poder trabajar con estas organizaciones, una en ayudarlos a encontrar el pipeline, algunas quieren invertir y no tienen gente en la región o no saben cómo hacerlo. Entonces podemos hacer ese trabajo por ellos y por otro lado, también es ayudarles a crear vínculos financieros.
Entonces creamos esta área que más de consultoría donde estamos trabajando con estos potenciales, inversionistas o fundaciones que quieren entrar al sector y por ahí el primer contrato más grande que hicimos con una fundación suiza donde los vamos a ayudar a hacer el recursos en Colombia, está fundación tiene la intención de invertir en Venture o impulsar un poco dentro de su misión a la juventud dentro de Colombia, quieren invertir en las startups colombianas enfocadas a la juventud. Básicamente lo que hicimos es crear un vehículo donde nosotros vamos a hacer lo que un fondo, vamos a buscar las empresas, vamos a filtrar, las vamos a hacer todo el proceso de inversión, vamos al comité de inversiones y la Fundación va a poder invertir recursos en esa empresa. La idea es poder invertir alrededor de 3 millones de euros anuales en startups colombianas, creo que vamos a poder ser un actor importante en Colombia, hacer tickets de 250 mil 1/6 tickets al año en Colombia, muy innovadoras, muy disruptivas, un poco la intención van a ir de la mano con inversionistas locales, con á
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