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El sesgo es una forma de gestionar la complejidad.
Cuando conozco el camino para llegar a casa, llego en seguida. Cuando es la primera vez que voy a un sitio, tardo muchísimo. Cuando vas con un niño por la calle, tardas más en llegar a cualquier sitio. Se para a ver una piedra, se para a ver un banco.
Está descubriéndolo todo y mirándolo todo por primera vez. Cuando tienes muchas cosas en tu vida y tienes que adoptar una mirada nueva muy a menudo, te puedes cansar mucho o estar estresada/o. Lo conocido es sencillo. Sabes lo que hay.
Hablamos de sesgo sobre todo cuando estamos discriminando por ejemplo por el color de la piel, por sexo o por edad. Estamos acordando una preferencia a uno de los grupos. Puede ser de forma consciente o inconsciente. Los sesgos inconscientes son los más peligrosos, ya que las personas que lo aplican no se dan cuenta.
Las mayores discriminaciones se están dando por parte de personas que no se dan cuenta de que están aplicando el sesgo.
Hablamos con Gènia Valls, coach para directivos y emprendedores, quien nos comparte experimentos y ejemplos de cómo se aplican los sesgos inconscientes, nos explica la importancia de prestar atención a cómo utilizamos el lenguaje y nos da recomendaciones para navegar los sesgos que nos aplican y que aplicamos.
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El sesgo es una forma de gestionar la complejidad.
Cuando conozco el camino para llegar a casa, llego en seguida. Cuando es la primera vez que voy a un sitio, tardo muchísimo. Cuando vas con un niño por la calle, tardas más en llegar a cualquier sitio. Se para a ver una piedra, se para a ver un banco. Está descubriéndolo todo y mirándolo todo por primera vez. Cuando tienes muchas cosas en tu vida y tienes que adoptar una mirada nueva muy a menudo, te puedes cansar mucho o estar estresada/o. Lo conocido es sencillo. Sabes lo que hay.
Hablamos de sesgo sobre todo cuando estamos discriminando por ejemplo por el color de la piel, por sexo o por edad. Estamos acordando una preferencia a uno de los grupos. Puede ser de forma consciente o de una forma inconsciente.
El sesgo consciente es el sesgo del «tú no puedes» y se reconoce abiertamente que un grupo está siendo encasillado y juzgado de manera diferente al grupo dominante. El sesgo inconsciente es más complicado, ya que no se dice abiertamente “tú no puedes”, sino que se piensa que ese grupo sí que puede. Pero en la realidad el grupo discriminado, no tiene el mismo derecho que el grupo no discriminado de actuar de la misma manera.
La persona que está aplicando un sesgo, no es consciente de ello. Cuando no es consciente de que está aplicando un sesgo, no se vigila al actuar.
Esto hace más difícil que la persona se de cuenta de que está aplicando un sesgo. Las mayores discriminaciones se están dando por parte de personas que no se dan cuenta de que están aplicando el sesgo.
Hay un experimento que se lleva a cabo en 1973 por Rosenhan, que estaba preocupado por como tratábamos a los enfermos mentales. En este experimento, 8 personas sanas se presentaron en distintos hospitales afirmando que escuchaban una voz en su cabeza que les decía de manera difusa algo como «vacío existencial». Los hospitales internaron a las 8 personas. Al día siguiente estas personas le comunicaron al personal del hospital, que ya no oían voces y que estaban listos para que les dieran el alta.
La media de la estancia en el hospital fue de 19 días.
De las 8 personas que afirmaron que creían escuchar voces, diagnosticaron a 7 con esquizofrenia. Esta afirmación fue suficiente para desatar un sesgo. Todo lo que hicieran o dijeran, se interpretaba como si estuvieran enfermos. Los que sí se dieron cuenta de que estas personas estaban sanas, fueron los otros enfermos. Los médicos estaban convencidos de que estaban delante de un enfermo. Los enfermos internados en los hospitales, estaban viendo personas.
Existe un test de asociación lingüística de Harvard en el que puedes evaluar tus sesgos en base a tus asociaciones con diferentes palabras e imágenes. A mi me sigue saliendo que tengo sesgo. Tanto en el tema racial, como en el tema del sexo. Lo que está mirando este test, es lo que yo asocio de manera inconsciente con mujeres y hombres o con blancos y negros. Yo no pienso que las mujeres sean mejores en arte y los hombres en ciencias, pero yo vivo en un contexto.
Los mensajes que recibimos en el día a día, nos afectan aunque no nos demos cuenta.
Por ejemplo, yo estudié un MBA, en el que la gran mayoría de los estudiantes eran hombres. Yo lo hice y lo hice bien, pero aun así el contexto me estaba diciendo que el MBA es para hombres. Según el contexto en el que nos movamos, tendremos diferentes sesgos. Por ejemplo, en USA se habla mucho de la necesidad de incorporar y fomentar la inclusión de mujeres en el mundo de la ciencia. Se han dado cuenta de que muchos empleadores tienen sesgos con respecto a las mujeres a la hora de contratar. Esto en Rusia no ocurre, ya que las mujeres siempre han formado parte del mundo científico. El contexto delimita mucho cómo te sientes tú y que sesgo vas a aplicar sin querer.
Se trata de navegar el sesgo, porque es algo que siempre vamos a tener para navegar la complejidad. Podemos estar de acuerdo que el azul del cielo y el azul oscuro es azul. O no… porque si eres italiana o rusa no se habla de azul, se habla de colores distintos. Y las personas que tienen dos colores para el azul, son capaces de detectar más tonalidades del azul. Cuando estas personas cambian de idioma y pasan a hablar por ejemplo inglés, que solamente existe un azul, dejan de distinguir las diferentes tonalidades.
Según como hablemos, así vemos. Dicen que el ser humano puede detectar 70 millones de colores. Cada experiencia es única, pero hay tanto que tenemos que agruparlo por paquetes para poder distinguir entre tanta complejidad.
A medida que surgen rol models (modelo a seguir), el sesgo se va difuminando.
No hace muchos años, era impensable que un presidente fuera negro o mujer. Ahora Obama fue presidente y Clinton estuvo a punto. Los rol models ayudan muchísimo, porque demuestran que sí puede existir un cambio.
Hay personas que están en contra de la cuotas. Yo estoy a favor de la cuotas porque ayudan a visibilizar. El mensaje de las cuotas es «esto es posible». Por otro lado, también escucho hablar de mujeres en cargos directivos que han actuado como hombres y que con ese comportamiento no ayudan. En mi opinión han ayudado mucho, solamente por el hecho de que estén en cargos directivos. El que estén ahí, ya le está mandando un mensaje a las mujeres de la organización que ellas también pueden.
Son estos primeros pasos, los que desencadenan cambios sistémicos. Los negros entraron en las pantallas como artistas y años después estaba Obama como presidente. Hubiera sido más difícil imaginarte un presidente negro, si no hubieras visto antes a una persona negra por la tele.
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