El proyecto de Refill Aqua tiene una misión: reducir las botellas de un sólo uso en Barcelona. Lo que en un primer momento parece simple, se transforma en algo ambicioso cuando entendemos el problema:
La costa de Barcelona es la segunda más contaminada de todo el Mediterráneo, con al menos 50 toneladas de plástico en el fondo del mar.
Cada día, aproximadamente, 8 millones de piezas de contaminación plástica llegan a los océanos.
En España son utilizadas 3.500 botellas plásticas por año, y solo el 30% se recicla. El resto de ellas y otros plásticos de un sólo uso llegan al mar Balear y acaban en el Océano Atlántico.
Allí se vuelven una amenaza para el ecosistema marino ya que una vez en el agua, pasan a formar parte de la cadena alimenticia de los animales marinos.
Marta Olszewska y Alex de Sousa, co-fundadores de Refill Aqua, empezaron a cuestionar el uso de plástico en su propia vida, hasta que llegó un momento en el que su compromiso de acción por el clima y la conservación de la vida submarina cobró tanto protagonismo que decidieron crear Refill Aqua para cambiar esa realidad que tanto los/as incomodaba.
Refill Aqua es una red de puntos de recarga de agua. En vez de usar y tirar una botella de plástico de un sólo uso, recargas tu botella.
Estos puntos de recarga se encuentran en cafés, restaurantes, estudios de yoga, eco tiendas y otros sitios públicos. Todos están disponibles en una app móvil, donde la gente encuentra una estación más cercana, entra y rellena su botella reutilizable sobre la marcha.
El proyecto está construyendo la red de puntos de recarga en Barcelona y ya tienen algunas estaciones en el barrio de Gràcia, en Poble Sec y El Born. Uno de los primeros puntos de recarga fue el restaurante Les Tres a la Cuina, en Gràcia, que hoy se ahorra 5 botellas de un litro por día.
Cerca de 110 botellas de 1 litro son evitadas sólo en una estación por mes. Si consideramos 250 puntos de recarga, podemos ahorrar 27.500 botellas por mes y llegar a un 330.000 al año.
Barcelona, además, tiene un problema en el sabor del agua: aunque es potable, tiene gusto a cloro.
Refill Aqua hace alianzas con empresas de filtros como Ecofiltro y Tapp Water para ofrecer sus filtros a los comercios con un descuento. Así, pueden ofrecer agua filtrada de buen sabor a sus clientes y a la gente que quiere rellenar sus botellas.
La unidad filtrante del Ecofiltro, por ejemplo, es un material compuesto, formado por tres materiales naturales que son la arcilla, el aserrín y la plata coloidal. El aserrín se convierte en carbón activado durante el proceso, y éste elimina todo mal olor, sabor y turbiedad del agua sin importar cuál sea su proveniencia.
“Hemos descubierto una manera de ayudar a los comercios a difundir su preocupación ecológica y crear una red de colaboración, lo que también nos ha ayudado a conseguir puntos nuevos.”
Refill Aqua es una empresa que primero que todo busca obtener un impacto social y ambiental, pero también, tiene planes de rentabilizar para poder continuar con el proyecto. Por eso, van a introducir un modelo de suscripción para los negocios. El reto es ganar más visibilidad ofreciendo descuentos a los usuarios. Por otro lado, acaban de lanzar una botella isotérmica de acero inoxidable que se puede comprar desde su tienda e-commerce.
Una empresa que nos demuestra que cuando se unen las ideas, la tecnología junto a la voluntad de las personas y comercios se pueden lograr grandes cosas, tan grandes como para limpiar todo un océano.